6 Claves para elegir una buena Agencia de Comunicación

6 Claves para elegir una buena Agencia de Comunicación

Una de las cuestiones cruciales a la hora de emprender un proyecto empresarial o poner en marcha un negocio, es determinar quién o quiénes serán los encargados de la comunicación de la compañía.

Para ello, la empresa puede optar o bien por crear un departamento interno encargado de gestionar la estrategia de marketing, relaciones públicas y publicidad de la empresa –bien en conjunto o bien por separado- o por contar con la ayuda de una agencia de comunicación externa, lo que puede suponerle un gran ahorro económico y de tiempo y, a su vez, muchas garantías.

Hoy os damos algunas claves importantes a la hora de tomar la decisión de confiar la comunicación de la marca a una agencia de comunicación como túatú.

1.    Experiencia de la Agencia de Comunicación en el Sector

La experiencia es un grado, se ha dicho siempre. Y en cierto modo, a la hora de elegir agencia de comunicación, así es. La empresa debe fijarse en la trayectoria de la agencia, en si la metodología que ha seguido hasta ahora ha sido efectiva, en los comentarios respecto a sus servicios que puedan haber hecho públicos sus antiguos o actuales clientes, en los años que lleva trabajando y cuál si ha mantenido una estabilidad a lo largo del tiempo.

La compañía no debe valorar no sólo la experiencia de la agencia en general, sino, además, la experiencia que tiene dentro del sector en el que opera la empresa. Si ha tenido otros clientes de características similares y las estrategias usadas han sido efectivas, puede ser una garantía para la marca confiar en ella.

2.    Capacidad del Equipo Humano que la Compone

No todo es experiencia. Aunque se trate de una agencia de comunicación reciente, hay otros indicadores que nos pueden hacer decantarnos por contratar sus servicios. Uno de ellos es la capacidad de los profesionales que integran la agencia de comunicación. No basta sólo con que tengan experiencia en el sector, que también es un aspecto a valorar para muchas empresas, sino que además sea un equipo formado, creativo y consciente de las novedades y tendencias del sector.

El equipo debe ser multidisciplinar y, además, debe estar bien coordinado. Es importante que, aunque haya mucha variedad de perfiles dentro de la agencia, las relaciones internas sean eficaces y efectivas, que haya buena comunicación e integración entre los profesionales que la componen y que no individualicen las tareas que tienen encomendadas. Es decir, que no se encargue cada uno de una parte de la estrategia comunicativa de la empresa, sino que haya coordinación y trabajo en equipo.

3.    Estrategia integral y global

Otro aspecto clave a la hora de determinar la elección de la agencia de comunicación, es asegurarse de que tiene capacidad suficiente como para ofrecer una estrategia comunicativa integral. Esto es, que no se centre exclusivamente en el marketing o en las relaciones públicas, sino que sea capaz de desarrollar e implementar acciones efectivas en todos los ámbitos de la comunicación y la publicidad de la empresa.

En línea con el ítem anterior, es necesario, por tanto, que los profesionales que la integran tengan formación y experiencia en los distintos sectores y que, a su vez, se comuniquen entre ellos y se expliquen las decisiones tomadas en cada ámbito o parte de la estrategia, pensando siempre en el interés y las necesidades del cliente en cuestión.

4.    Cartera de clientes y agenda de contactos

Este aspecto tiene que ver con la experiencia de la empresa. Es importante hacer una mínima búsqueda de los clientes que ha tenido o tiene la agencia, investigar los resultados que ha dado en cada caso la estrategia aplicada y si se han mantenido en el tiempo.

La cartera de clientes de una agencia de comunicación es un muy buen elemento para definirla; la categoría e importancia de sus clientes, así como el tiempo que han estado confiando en la empresa –esto especialmente- es un aspecto que hay que valorar muy positivamente. El grado de fidelización de la agencia es un muy buen indicativo del éxito y la confianza que han depositado en ella otros clientes.

Además, cuanta más experiencia y exitosa trayectoria, mayor agenda de contactos tendrá la agencia. Esto es destacable, ya que gran parte del éxito de algunas acciones que realizan las agencias se basan en el contacto con periodistas y medios. Cuanto más acostumbrada esté la agencia y el equipo a moverse en este ámbito, mayor accesibilidad a los medios y a sus profesionales tendrá.

5.    Adaptación a las nuevas tecnologías

La agencia de comunicación debe garantizar no sólo el trabajo con medios convencionales y el uso de técnicas tradicionales de publicidad y relaciones públicas, sino que además debe estar al día, 100%, de todas las novedades del sector. Para ello, es importante que esté al corriente de nuevas tendencias en Internet, viralidad e influencers, redes sociales, acciones en buscadores, nuevas tendencias de consumo, y que esté informado del uso de nuevas herramientas como realidad virtual y el entorno del Big Data, etcétera.

Debemos saber si estamos ante una agencia creativa, con ideas frescas y novedosas, que está al corriente de todo lo que sucede a su alrededor y de que tiene una gran capacidad de adaptación y anticipación a los cambios, algo imprescindible en el sector de la comunicación, que puede resultar determinante para su eficacia y éxito.  

6.    Relación entre la empresa y la agencia de comunicación

La relación entre empresa y agencia debe ser fluida, eficaz, constante y clara. Ambas deben estar al corriente de todas las decisiones que se tomen en una y otra; la empresa deberá encargarse de proporcionar todo lo necesario a la agencia para que ésta pueda hacer su trabajo. Y la agencia, a su vez, deberá comunicar todas las acciones que lleva a cabo a la empresa para que las apruebe, aconsejarle profesionalmente cuáles cree que son más oportunas según el momento, etc.

Es importante que la agencia sea transparente y fiable, que no sólo se guie por intereses económicos, sino que haya una implicación real en la empresa por parte de los profesionales.