La accesibilidad de Google

Imagen extraída de Google Antes de comenzar a hablar del buscador de Google, es importante explicar que las personas con ceguera total que utilizamos ordenadores (lo mismo ocurre con los teléfonos móviles) necesitamos para poder trabajar con ellos unos programas llamados lectores de pantalla. Su función es la de ir leyendo, a través de una voz sintética, lo que se va encontrando el cursor en su navegación.

Esto abarca todo lo que podamos utilizar en un ordenador: los menús generales y de contexto de los distintos programas, los textos de Word, los cuadros de diálogo, los mensajes de advertencia o notificación del equipo o los programas, o cualquier otro elemento de información textual que podamos encontrarnos en el trabajo cotidiano.

En los PCs con Windows como el mío el programa más utilizado es el Jaws, una aplicación que se instala cómodamente en pocos minutos en el equipo, que permite manejarse sin demasiados problemas tanto en el entorno de Office como en Internet. Otra cosa es si nos adentramos en aplicaciones más complejas. En ese caso el usuario ciego tiene invariablemente que apelar a su paciencia y su pericia para que el tiempo invertido resulte productivo.

En el caso de los Mac el lector de pantalla se llama Over Voice, y su gran ventaja es que ya viene integrado de serie en los terminales. Esto permite evitar los posibles problemas que puede acarrear la instalación de un programa como el Jaws en lo que a incompatibilidades se refiere. Por otro lado posibilita beneficiarse del hecho de que la accesibilidad está integrada no solo como concepto, sino como parte del hardware y el software.

Para que un lector de pantalla funcione de forma eficiente en una web, dicha home debe ser diáfana, sin una carga excesiva de imágenes ni de enlaces o banners, para que al Jaws no le cueste demasiado interpretar y leer los textos que nos permitan navegar por ella sin dificultad. Porque en ocasiones las páginas en las que entramos son tan pesadas, que sencillamente la voz del Jaws desaparece durante unos largos minutos, mientras se cargan los contenidos de la web.

El buscador de Google cumple ampliamente con todos estos requerimientos mínimos de accesibilidad. Se carga rápidamente, se accede con suma sencillez a los distintos enlaces, es muy intuitiva en su manejo y no existe el exceso de links que es tan frecuente en un gran porcentaje de páginas.

Pero el elemento que convierte a Google.es en una página realmente manejable para las personas que necesitamos lectores de pantalla para navegar es un aviso que figura en su parte superior, que permite a los usuarios de lectores de pantalla hacer click para desactivar Google Instant, convirtiendo al instante la web al formato HTML, que es el más idóneo para el Jaws.

Obviamente, no utilizo los enlaces de Google para la búsqueda de imágenes o lugares en los mapas, pero me atrevería a decir que por lo que puedo observar entrando en ambas áreas de Google no resulta difícil. En cualquier caso, encontrar los resultados esperados a través de la búsqueda de palabras, frases o conceptos, que es para lo que utilizamos Google la mayor parte de las ocasiones, es realmente sencilla y no entraña ningún inconveniente.

Google es, sin lugar a dudas, un buscador para todos.