Employer branding: la estrategia básica para crear compromiso en los empleados

A la hora de plantearnos el mejorar nuestro employer branding, lo principal es saber definir una estrategia de comunicación interna y corporativa que podamos desarrollar con facilidad. Lo principal es saber transmitir valores positivos tanto a nivel funcional y económico como psicológico. El objetivo final es conseguir la satisfacción de los empleados, que redundará en un mayor compromiso y, por supuesto, en la transmisión de dicha satisfacción a los consumidores.

¿Cuáles son los pasos básicos para que esta estrategia prospere? Lo primero, ante todo, es que nuestra empresa tenga asociados esos valores positivos de por sí. Por ello, hay que esforzarse en aumentar nuestra reputación, nuestro reconocimiento dentro del sector y en el cada vez más relevante ámbito online. Debemos detenernos todo el tiempo necesario en este punto y no pasar a los siguientes sin estar seguros de haber llegado a la cima deseada.

Una vez conseguida la reputación que deseamos, será más fácil para nosotros alcanzar los siguientes aspectos: conseguir que el empleado tenga una visión atractiva de la compañía, a través de su posicionamiento, y poco a poco ir inculcando ese compromiso y fidelización. El concepto de engagement, que tanto utilizamos para hablar de clientes, también se encuentra inmerso en la cultura del employer branding: en el momento en que los valores se filtran a todos los niveles, es entonces cuando se consigue esa satisfacción y feedback antes mencionado. Finalmente, si se consigue el efecto deseado, todo echará a rodar sin más y sólo tendremos que preocuparnos de mantener la motivación, entrando en una nueva fase estratégica.