Employer Branding: consejos para el uso de las redes corporativas

redes sociales corporativas

En nuestro blog ya hemos hablado de las redes sociales en la empresa, y de cómo empiezan a surgir muchas de ellas que, basándose en las mayoritarias como Twitter o Facebook, están especialmente diseñadas para facilitar el contacto entre empleados. No obstante, es importante delimitar la forma correcta de utilizarlas, para no caer en el error de que se conviertan en una red social más, sin mucha diferencia con cualquiera de las citadas anteriormente.

La formación es fundamental, aunque sea a un nivel básico, para que nuestros empleados entiendan el valor que pueden otorgar las redes sociales corporativas a la empresa. Por una parte, puede servir para transmitir comunicados o información importante para el día a día, de manera inmediata, evitando el papeleo o el tener que enviar un correo electrónico. La limpieza de la información es, por tanto, una de sus ventajas.

La colaboración y el compartir conocimientos son otros aspectos indisolubles. En este sentido no se diferencian demasiado de la filosofía de cualquier red social, o del propio Internet. No obstante, el uso de esta clase de medios en la empresa, en muchas ocasiones, favorece esta actitud colaborativa a mayor escala incluso que en persona, quizás por la posibilidad de explicarse mejor por escrito, de poner en contacto a personas que no tienen la posibilidad de encontrarse cara a cara...

En tercer lugar, podemos emplear las redes sociales corporativas para difundir esos valores o mensajes inherentes a la empresa que a veces parecen un poco difusos o que no tienen cabida en otros medios. Nos permiten, de esta manera, reforzar lo que se conoce como la cultura empresarial, abriendo además líneas de debate y la posibilidad de aportar nuevas ideas o visiones críticas.